lunes, octubre 23, 2006

Septiembre otra vez,...














Con Te Partirò (2)

Septiembre otra vez, y reverdezco
aunque sea otoño, tú voz como un eco
sonoro, quebrada por la agitación
del ardor de la piel en excitación,
me hace estremecer embotando el sentido.

Loca aventura es el amor que nace,
sin saber si será duradero o fenece,
con la luz de la nueva alborada,
pero yo en tus brazos arrullada,
después de amarte, no importa morir mañana.

Dedos diestros envuelven el tallo,
que erguido se debate en el desmayo,
para volver a empezar, acalorado,
fluyendo en sedoso borboteo,
ante los labios diestros llenos de deseo.

Te arrastro por mí corriente,...
anudándote con mis piernas y brazos,
acometes gimiendo y exaltados,...
lamiéndonos sedientos y abotargados,
te adentras en mí penetrando.

Beber todas tus humedades quiero,
nutrirme de tú savia, simiente de vida,
sin pensar que llegará la partida,...
poros abiertos, huecos rellenos,
salivas mezcladas en las pieles escocidas.

El relax nos encuentra abrazados,
mí cabeza sobre el hueco de tú hombro,
la mente, cercena el grito cuando te nombro,
queriendo retenerte para que te quedes,...
te beso y cierro los ojos.

Aún estoy aquí
















E Chiove

¿Qué pasa cuándo uno deja de estar?
¿Cuándo ya no dice "te amo"?
¿Cuándo nunca más te haces sentir?
¿Cuándo no éstas más?
Perteneces al pasado,

eres solamente un recuerdo
que se evoca con nostalgia,
y desapareces lentamente
hasta no existir más,...
ni siquiera en el pensamiento.
" Somos" mientras estamos,

y después qué? la nada,...
esa torturante y despiadada,...
nada...
el vacío total de presencia,
el recuerdo lejano del haber podido ser.
El amor se evapora,

el cariño se pierde,
el sentir se escapa,
y ya nada queda de ti,...
nada...
Solo reza,...

una pequeña plegaría,
porque aún estoy aquí,
para que aún no me vaya.

domingo, octubre 22, 2006

Sueños





















Sueños compartidos que sólo son fantasías,
soledades de almas escasas de alegrías
que cautivas y prisioneras del desamor,
vagan perdidas esperando encontrar calor.
Invierno instalado en los huesos cansados
de ausentes primaveras florecidas,
antaño recuerdo de caricias ávidas,
que son espejismos que trae el pasado.
Tal vez exista un mañana con amor
que resucite con besos apasionados,
pieles marchitas carentes de color,
sumidas en oscuros laberintos olvidados.
Fantasmas que transitan por la vida,
indiferentes, sombras extrañas y vacías,
temerosas se escurren, negándose con porfía,
sentimientos que brotan del corazón que palpita.

sábado, octubre 21, 2006

Ceguera




















Su mecha larga, nueva e impregnada de cera, arde presurosa, al solo contacto de la flama de una cerilla encendida. La llama avivada y solícita, se yergue erguida, voluptuosa y esbelta a la vez, iluminando con nitidez, los objetos que la rodean, pudiendo distinguir sus colores y sus formas. Por momentos, en su arder continuo, crepita e incluso despide unas pequeñas y casi imperceptibles chispas, pero la llama inexorable, voraz y despiadada, incinerándola, la va derritiendo, licuándola, disolviéndola, mientras la cera, corre a través de la vela, hincándose a sus pies y dejándole en su pared cilíndrica, un amasijo de siluetas extrañas.
No hay corrientes de aire, puertas y ventanas están cerradas, pero ella igual, inicia una coreografía dantesca occilando de un lado al otro, ascendiendo y descendiendo presurosamente, como si de una danza ritual se tratara. Su luz tenue, se va debilitando a medida que se va consumiendo sin pausa, la estática vela.
En su fragilidad, producto de su avidez, sumergida en la semipenumbra, las sombras que ella produce, se van agrandando, hasta agigantarse y su baile exótico, les confiere un movimiento diabólico, como si acechándome, fueran a caer sobre mí y engulléndome, me traguen haciéndome desparecer.
A medida que la va disolviendo, ella se va extinguiendo. Moribunda, en un intento de seguir encendida, hace que la infortunada mecha, exhale – cómo si de un último suspiro se tratase – un humo gris, que asciende ondulado y espiralado, perdiéndose, diluyéndose.
Ya llegó su fin, las sombras todo lo cubren y expirando se apaga, sumergiéndome en la tenebrosa oscuridad.
La ceguera que padezco, producto de una enfermedad, me privó de distinguir los colores de las cosas que me rodean y poder seguir admirando las formas y descubrir los distintos matices de la belleza.

Ahora, en ésta oscuridad total, en donde no éxiste ni un vestigio de luz, el tacto, el gusto, los olores y los sonidos, estimulan mí imaginación y veo entre tinieblas.

Mosca vs Ambulancia ( Fábula)


Erase una vez,... una mosca perversa, taimada y muy molesta. Su pasatiempo favorito: molestar a inofensivos chóferes de coches, hasta el extremo de contentarse, provocando accidentes automovilísticos.
Se metía dentro de estos, a través de las ventanas bajas, fastidiando a los conductores hasta hacerles perder los estribos.
La mosca se jactaba de esquivar los manotazos de éstos y de que nunca hubiesen podido hacerle daño.
Gozaba entre sus congéneres, de una merecida reputación, por ser la única de su especie que poseía un alto coeficiente intelectual y ser ella, solo ella, la que al azar eligiera a sus víctimas, para demostrar que una mosca, podía ser cruel y planificar inteligentemente y con mente fría, infortunios a los humanos, aún siendo ella tan minúscula e insignificante y según ellos, tan asquerosa.
Su táctica era siempre la misma, primero se lamía insistentemente las patas peludas, pues sabía que cuanta más saliva dejara acumulada en ellas, sus uñas y ventosas, más pegajosas se ponían. Luego, desde el tacho de basura en donde descansaba, se detenía en mirar pasar los automóviles por la avenida y elegía uno, eso sí, uno en que el conductor fuera solo, sin acompañante.
Una vez elegido, salía volando raudamente, para introducirse dentro de esa máquina veloz, por cualquier rendija de sus ventanas y comenzar pacientemente, su tan estudiado ataque.
Se posaba primero en la frente del incauto conductor, le toreaba a sus manazas grandes y pesadas, para luego posarse en su boca. Ésta táctica además de ser molesta, les producía suficiente asco hasta el punto de sacarlos de quicio.
Toreaba un poco más y por último, la estocada final, pasar de un ojo al otro, danzando entre tanto parpadeo y manotazos. A veces le llevaba más tiempo de lo previsto, pero al fin conseguía su objetivo, que el conductor frenara de golpe el bólido que conducía, haciendo que otro bólido igual, que viniera detrás lo impactara, o simplemente, que se subiera a una acera y se incrustara contra un poste.
Después de esto, la mosca se regocijándose de su hazaña, se frotaba las patas dejando el lugar de los hechos, volando libremente... Hasta que un día, dejó su estrategia por una distracción.
Ese día fatídico y nefasto, pensando la mosca ¿ qué sería eso, que los humanos llamaban destino?, absorta, escuchó en la lejanía, un ulular persistente.
Era el sonido que emitía una ambulancia, que se acercaba por la avenida.
Algo confusa por el divague de sus pensamientos, confundió ese ulular característico de hechos fortuitos, con el sonido del apareamiento que producían las moscas hembras, incitando a los machos a copularlas y poder así, fecundar sus 750 huevos.
La mosca, no se detuvo a mirar con sus ojos compuestos y prominentes que todo lo veían, en que era una ambulancia lo que se acercaba, un bólido blanco con destellos rojos encima y del tamaño de un asteroide, para la tan diminuta y poca cosa que era la mosca.
Lo que ella escuchaba excitada, era el sonido del amor, había que darse prisa. Salió disparada como zaeta veloz hacia el lugar, en que provenía el sonido, pero una vez en medio de la avenida, fue tarde para darse cuenta de su error.
Quedó estampada en el parabrisa de la ambulancia, creyendo ingenuamente, que moría por amor.

Moraleja: “Todo trabajo peligroso, requiere un máximo de concentración, una mínima distracción puede causar la muerte.”

Poeta













Alma Mía

Poeta que versas sentimientos en noches de insomnio, musa que surge con la luz tenue de la lámpara reflejando sombras, siluetas que naufragan de amantes enredados y un mismo suspirar,… enamorado.
¡Cércame la piel con tus brazos, cíñeme mis límites, aspírame, reprímeme la carne que vibra, quémame y escucha mis gemidos que aúllan insatisfechos esperándote!.
Llegas a mí después de haber andado tanto, percibiendo mis pensamientos en rumores que te alcanzó el viento, sin falsos sentidos ni artificiales modos, tú sabes quien soy y que a ti me acomodo,… perfecto encaje tu cuerpo y el mío son uno solo.
Auténticos y sin máculas, transparentes como agua clara, surgió el sentir traspasando la mente y anido sereno residiendo en ti y en mí, el amor para ser eterno.
¡Poeta conjúgame los verbos, recorre con ellos la piel que despide aromas y afiebrada supura fluidos sin prejuicios, abdicando sumisa al contacto de tus labios que tanto ansío!.
Cuaja la prosa sutil de tu pluma en los vericuetos de mis vértices, haciendo verdad tanta quimera soñada en solitarias noches de vacía alcoba,…hoy, lecho que a los dos nos da cobijo, desnudos los tegumentos nos fundimos ahogándome el grito con tus besos.
Anhelantes sensaciones nos encadenan con sus eslabones, de esperanzas que llegaron con la poesía, y tu costado también es mí costado, tú el peregrino viajero que vienes a mí, yo tu hospitalidad y te albergo porque soy tu alter ego.
¡Poeta, que mi alma encontró en ti su alma gemela!,… y dejó de vagar sedienta al beber de tu boca fresca, resucitando el deseo en el pellejo añejo de quien ya nada espera.

Tus manos





















Ghost


Pérdida en el laberinto de mis sueños,
Estéril y solitaria me siento languidecer,
Ilusiones marchitas quieren perecer
Y me resisto al ocaso del paso de los años.

Añoro tú presencia y tus manos,
Que con suavidad desnudan atrevidas,
Estremeciendo la piel desvestida
Y sólo son, recuerdos de tiempos arcanos.

Tus manos fuertes como navegantes,
Por el mar de mis poros se deslizan
Y mis sentidos alertas se desperezan,
A las caricias de tus manos amantes.
Expertas recorren mí geografía con tacto,
Alterada la sangre se vuelve efervescente,
Desapareciendo el invisible puente,
Consumamos en comunión el acto.

Tú piel y la mía endosadas son el nexo,
Tú el cóncavo y yo el convexo,
Muslos húmedos, caderas cimbreantes,
Con movimientos rítmicos y acariciantes...

¡No eres un sueño, eres real!...
llegarás a mí nuevamente peregrino viajero,
recorrerás paciente mis caminos certero
y beberás el agua de mí manantial.

Nueve Lunas




















Vangelis - Rachels Song


Apasionado y libidinoso encuentro encontró la tierra fértil para sembrar su simiente, encapsulada semilla apañada en la tibia cuna de arcilla, la luna llena vigía observa con una sonrisa.
Capullo que ni te haces sentir aún, vas cambiando como las fases de la luna que te ilumina moldeándote silueta.
El vientre donde moras te alimenta, savia de vida que robustece convirtiéndote en ninfa con el arribo de la segunda luna llena,…crisálida en el cuerpo de una mujer que con ternezas te sustenta.
Cíclica luna regresas llena, oteas desde tu atalaya a la mujer que con paciente calma, acaricia su vientre que se abulta, cantándole nanas a su amorfo cigoto para que la oiga con voz que anhela.
Flota sílfide en tu burbuja de agua, el amor te rodea entre suspiros de espera mientras la luna ronda a tu madre, marcándole el tiempo que aún falta para tu arribada al mundo que se presenta.
Embrión que creces y tus formas ya te identifican sexo, varón dijeron cuando llegó nuevamente la luna y observándote dio un paseo por las ansias tiernas de tu madre que te lleva a cuestas.
Tu corazón late al compás del suave palpitar de tu madre,… que se mira al espejo viendo como creces en sus entrañas, dulces sonrisas afloran en su cara,…y la luna escolta los días que faltan, en vela.
El espacio se hace pequeño, te desperezas y estiras las piernas produciendo alboroto en quienes te sueñan,…te proyectan un futuro de cosas buenas,…la luna patrulla los meses de la tierna espera.
Fuerte y sano quieres salir, pero aún no es el momento, la luna vigilante espía desde una azotea con risa picaresca y se va a dar otra vuelta.
Llegó el momento mi niño, la luna observa el jadeo de tu madre que puja, ayudándote para que nazcas a la vida, que generosa te augura la bienvenida.

¡Tango!


Pasional

Al compás del dos por cuatro
del fuelle que lamento llora,
tu mano ciñe mí cintura
apretándome contra tu pecho,...
mi brazo rodea tu cuello
con sensualidad
acaricíando tu nuca,
mientras dedos enredados prietos,
- sostén de firuletes -
húmedos como las mejillas
que se juntan.
Tango que nos envuelve
melodioso y lascivo,
tu pierna entre mis piernas,
roces de ingles y el pie diestro
que sube cual halago,
anudándose a tu pantorrilla,...
entretanto delantera contra escote,
se oye un solo latir enajenado,...
aislándonos embriagados.
Sólo la música nos trastorna,
el cuerpo es uno solo
danzando armonioso,
contacto de pieles arreboladas,
poros abiertos
que exudan extasiados,
giros y balanceos,
mí cuerpo tendido sobre el tuyo
en la pausa arrulladora,...
excitados nos dejamos llevar.
¡Tango!,... voz y lamento
nostálgico de mí Buenos Aires,
impúdico y libidinoso,
melancolía amorosa
de enamorados,
que apretujados estimulan,
ánimo, fascinado e íntimo,
que gime en su bandoneón
que tanto añora.

Un día más


"...Y me escondo, me escondo
detrás de las palabras
porque es donde siempre me encuentras".
MAREA

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Como cada día y no importa el momento, te hablo a través de palabras escritas, en un monólogo silente desde lo más profundo de mí, trasladando mi sentir y mis miedos llenos de nostalgia y ésta añoranza de ti en cada poro.
¡ Te amo tanto, tanto amor!, ... un océano he cruzado con ilusiones que se diluyeron hasta tu aparición, hoy el mar nos une y mis ojos miran siempre el piélago, su aroma salobre me llega con la brisa y extasiada, su sonido me arrulla,... olas que rompen sonoras en la playa de mi alma, diminutos granos de arena acarician mi cuerpo tendido en su orilla,... y un rocío de gotitas de espuma humedecen mi piel hambrienta de la tuya.
Tu recuerdo me hechiza y sabiéndote, lío versos amorosos y los acordono con los míos,... poemas nacidos del corazón que ama en silencio, enredados los sentimientos, amamos seducidos el uno por el otro, cual dos adolescentes cautivados en un ocaso que mágicamente se convirtió en alborada.
Esperanza que emergió con tu llegada, ausente y perdida germinó con tu palabra,... sin prisas y con cautela, fuiste demoliendo montañas de miedos, derribaste murrallas de desconfianza, abatiste la omisión de mí soledad, tumbaste el descreimiento del amor, destrozaste mis argumentos y destituiste la falta de fe que en mí había.
Me supiste de siempre, me sabes aún en tu circunspecta mudez y en mis discretos sigilos,... prudencia es nuestra aliada y bajo su manto, el amor crece sin pausas,... nos consume el deseo apasionado de amantes, ... adoración en la distancia repleta de anhelos, en las zurcidas costuras de nuestros pellejos remojados de esencias, gritos secretos en la ansiedad zozobrante de la lejanía,... ¡ y te amo,... y me amas!... eres desde que me supiste,... y soy sabiéndote mío.
¡ Te espero amor,.... siempre te espero!,... con la angustía en las entrañas, la ternura emanando de mi aura, ... y el amor incrustado en mi corazón.


La Pitonisa
















Bebió el agua del vaso que le ofreció instándola a hacerlo, luego, ella estiró su mano, lo tomó y lo puso boca abajo, sobre la mesa redonda barnizada de tres patas, así lo dejó un buen rato mientras barajaba las cartas de tarot con maestría.
- No creía en lo esotérico, siempre le pareció ingenua la gente que recurría a éstas prácticas para aventurarse a que le adivinaran la suerte, sucedió a veces que algunos aciertos le dieron notoriedad a algunas pitonisas, pero siempre creyó que eran casualidades y eso hacía que adquirieran una fama que no era tal….hoy, ella estaba allí sentada depositando sus esperanzas en esas cartas y en esa Pitonisa, así eran sus desesperos de mujer enamorada.-
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La hizo cortar las cartas, luego puso 4 en forma de cruz dadas vuelta mostrando las figuras que en ellas aparecían, el ahorcado, el loco, la templanza y el sumo sacerdote, dijo que eran los Arcanos mayores y que mostraban las situaciones e imágenes relativas a los grandes principios de la vida.
Con atención seguía las manos de la Pitonisa y escuchaba todo lo que le iba diciendo.
- El ahorcado te muestra detenida ante los acontecimientos o te has quedado en “suspenso”, sin respuestas. Todo lo que ronda a tu alrededor pareciera estar en tu contra, pero quizás lo que te atrapa sean tus propios esquemas y están en tu mente.- pasó a la siguiente carta –
- El loco, …buscas como una niña encontrarte a ti misma, aún no sabes que sabes, eres creativa y te protege la Voluntad Divina, te sientes libre, sin ataduras, y todo ocurre como debe ser.
- La templanza,…ésta carta te caracteriza por tu paciencia y capacidad de espera, templar el carácter es saber sobrellevar los altibajos de la existencia humana, y tú, la estás dejando fluir mientras sientes vibrar la vida y experimentas el contacto con la realidad particular que te toca vivir.
- La última, el Sumo Sacerdote también llamado el Hierofante en “religiones antiguas”,… se basa en la fe, no sólo tienes la capacidad de razonar, sino que también intuyes. Estás siempre en comunicación con Dios, es tu guía espiritual y te habla y aconseja desde tu corazón haciendo fácil la comprensión de ti misma y de lo intangible.
Puso 4 cartas más encima de éstas y dijo que se llamaban Arcanos menores,
- “…estás cartas nos revelan situaciones más cercanas a lo cotidiano,…oro, basto, copa, espada, son representados sólo en los ases, como símbolos aristotélicos : fuego, agua, aire y tierra…luego le siguen las otras - siguió explicándole mientras iba montando una carta sobre la otra, las figuras aparecieron ante sus ojos oscuros, el as de copas, la reina de oro, el rey de espada y el 4 de copas invertido,…sin parpadear las miraba mientras seguía atenta a las palabras-
- Te lo haré entendible, la reina te representa a ti, mujer de cabello castaño, el oro simboliza la tierra, los frutos del trabajo, bienes, patrimonio, etc, pero se determinará en el conjunto,… el rey de espada representa a un hombre maduro, de cabello negro y la espada es el aire, juicios , valores, miedos, deseos,…sigo,… el 4 de copas encarna a otra mujer, invertido significa maldad, dolor, desamor, amargura,…y el as de copa,…ésta carta personifica al amor, la familia, la alegría, la amistad y la fe, no sería así estando invertida, …el as de copa nos muestra emociones y sentimientos en armonía, alegría y paz interior, fusión del espíritu y la materia, ésta carta nos dice que se inicia una relación amorosa o se consolida la ya formada, con los 5 sentidos despiertos y la sensibilidad puesta en ese amor. El hombre enamorado de ti teme perderte, te valora y eres la mujer de su vida, te desea profundamente. En medio hay otra mujer, más joven y llena de rencor, está obsesionada con él y al ser rechazada su amargura hace que lo desprestigie. El conjunto de las cartas me dicen, que eres una mujer que ama y eres correspondida, que lo esperarás siempre ya que es el hombre de tu vida y al que amas más allá de todo. Eres correspondida y estarán juntos pronto. – se sintió feliz, no hizo falta preguntar nada, todo estaba allí y era por lo que había ido a verla. Necesitaba de esas palabras que le llevaran un poco de esperanza y la tranquilizaran un poco. Dijo que él la amaba y que pronto estarían juntos.
Cuando iba a preguntarle cuanto le debía así le pagaba y ya se iba, la vio tomar el vaso y darlo vuelta, la Pitonisa miraba el círculo de agua que había dejado marcado el vaso sobre la mesa, sus ojos notaron el ceño fruncido de ésta y pregunto:
- ¿Pasa algo?, ¿qué significado tiene ese círculo de agua? – su voz sonó trémula y angustiada.
- El círculo perfecto alude al infinito y lo eterno, donde se ensancha si es hacia dentro, deberás enfrentarte con problemas que traerán angustias, si es hacía fuera, como en éste caso, muestra los dolores pasados que ya no vuelven,… sólo que no cierra totalmente, ésta abierto en dos lados, uno apenas perceptible me dice que estuviste al borde de la muerte – levantó la vista para mirarla y ella se preguntó como lo sabía, asintiendo con la cabeza -, pero el otro,…- ya no dijo nada más.
- ¿El otro que significa?, ¿acaso me moriré? – sentía el miedo con su gusto amargo en la boca y que las lágrimas saltarían solas de sus ojos sin poderlo evitar.
- Todos moriremos algún día, la vida siempre es corta. – paso su mano por el círculo de agua desparramándolo hasta hacerlo desaparecer.- Son 50 euros -
- ¿No va a decirme nada más?,… ¿moriré pronto? – las lágrimas ya corrían por sus mejillas.-
- ¿Quién lo sabe?,… la vida y la muerte son algo Divino y sólo Dios sabe cuando ocurrirá, tú disfruta del amor, ya lo tienes.- se levantó para salir por la puerta que estaba a su espalda.
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Lo abrazó con fuerza mientras sus labios estrellados en los de él se bebían los besos llenos de ansias . Lo sabía en los bordes de sus suturas, en las esquinas ocultas de sus afiebrados poros, en el abismo de sus anhelos, él era todo su universo y ya no había dudas.
La última semana la pasaron juntos prodigándose caricias y ternuras, deseos que los consumía en la lejanía y hoy eran reales en el tacto y en la fricción de las pieles.
Estaba rebosante de aromas y humedades derramadas en sus entrañas, se sabía inmensamente feliz y ésta era su última separación, todo estaba dispuesto para que vivieran juntos amándose.
Lo vio partir con la promesa instalada en sus pliegues, … una semana más y estarían juntos para siempre.
Ésta vez lloraba de alegría, se sentía inmensamente feliz y marcho apresurada, había que preparar muchas cosas y …¡ sólo tenía una semana!.
Cruzó la calle sin mirar con la dicha dibujada en su semblante, no vio venir la camioneta sumida en sus pensamientos llenos de decisiones.
El impacto la levanto en el aire cayendo 40 metros más adelante, su sonrisa seguía aún en sus labios sin haberse percatado que la vida huyó tras él, dejándola inerte al cobijo de la muerte que tomo su mano para llevarla.
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Mentira


This Masquerade

¡Mentira,…mentira que sales de una boca y que rondas opacando ilusiones, manchando inmaculados sentimientos aseverando conocer lo que desconoces, ensuciando con afirmaciones que ni siquiera son supuestos!.
Mentiras que no son más que deseos enfermizos de querer obtener lo que otro posee, pecado capital que daña sin pruebas en los prejuicios, alimentando fantasías en quienes escuchan otorgándole credibilidad y repitiendo lo dicho.
Avalancha de palabras que no son más que desperdicios, provocando recelos y desconfianza, en donde antes anidaba el idilio.
¡Mentira!,…¡al amor no lo alcanzan las falsedades, las envidias no tiñen la confianza ni embadurnan los residuos la esperanza!.
Donde mora la verdad no hay lugar para la mentira,…no hay nada que esconder del ayer que rebosa vivencias de vida, dolorosas, altruistas, enamoradas, con tristezas y alegrías,…erróneas y verídicas, con aciertos en las dichas,…¡qué nos ayudan a crecer en ésta corta vida!.
¡Mentira que hablas de quien las esparce como mala semilla y que brotan en tierra árida de sentimientos, lugar donde radica la malicia!.
¡Qué pena ver tanta desidia!,…fe, esperanza y credibilidad le hacen frente,… por cada germen malintencionado florecen suspiros, por cada palabra suspicaz brota un manantial de lazos anudados, por cada tormenta desatada llega el escampado de la mano del sol que roza cálido las almas apasionadas.
¡Pobre humanidad nuestra cargada de equivocaciones!,…¿no es así cómo se aprende día a día?,…sanando heridas, reparando desaciertos, desterrando yerros, silenciando disparates, evaporando erratas.
¿Quién no tiene pasado?,…¡sólo importa el hoy!,…lo que somos ahora mismo abriendo el corazón y mostrándonos tal cual somos,…¡imperfectos!.
¡Mentira te proscribo de mi vida!,…sorda soy a tu abulia insensible que ya no me lastima, porque la verdad prevalece por encima de ti y sólo ella es mí guía.

Soy tu mujer


Autumn in New York

Soy la mujer que te sueña cada noche, la que habita en dos mundos ambos mágicos, uno rodeado de bellezas naturales cíclico y real, el otro, pura fantasía en donde se puede detener el tiempo, hacer que las agujas del reloj giren a la inversa repitiendo momentos, eternizando primaveras, inmortalizando besos, perpetuando ternezas y que los jazmines sean perennes a la luz de un sol que nunca se oculta, y que en las noches siempre constantes, nos abrace la luna llena.
Soy la mujer que te inunda con rocíos de esperanza, lluvia tibia que acaricia tu piel silente de ausencias, Penélope que espera paciente sobreviviendo en mí el verbo amar, sintiéndome aún tú lejano, incrustada en tu costado.
Soy la única mujer que te embriaga atándote a mis vértices, recovecos que sólo tú transitas haciéndome dúctil en tus manos que por ti supuran aromas, hembra forjada en la fragua de tus labios, labrada con suspiros de anhelos, fundida al tegumento de tu carne inmaculada y sin pasado.
Soy tu mujer, certidumbre de tus añoranzas hechas realidad, promesa y decisión de recorrer la misma latitud sin desvíos, en el otoño de nuestra soledad, con bríos de amaneceres listos para volver a empezar.
Soy la mujer que moraba en tu íntimo secreto, el profundo, entre nebulosas brumas sin ser silueta y hoy, despejada y clara, perceptible y material, abotonada me llevas aspirándome afanoso, en las suturas de tus deseos.
Soy tu mujer y hembra, la que teje con hilos de versos ilusiones imperecederas, parábolas en nuestras almas y sensaciones en las esquinas que palpitan, relentes escarchas que se derriten apasionadas.
Sólo soy la mujer que tú, amor mío, esperabas.

Alfarero


Contigo En La Distancia

En el éter de tu noche oscura me sueñas, alimentas la fragua de Vulcano para forjarme figura de mujer, idealizada en siluetas que presientes sin verlas, senos firmes en un pecho que alimento retoños en tibiezas de cariño, vientre plano en el que fue cuna distendiéndose y contrayéndose hasta la llegada de una nueva ninfa que gritaba a la vida,…el tiempo paso y se convirtió en tierra árida, pero tú cincelas fértil campo de greda queriendo inseminarle semillas nuevas.
Alfarero que amalgamas sentimientos, expresión de deseos en versos enamorados que no sabes si verán la luz del día, y en ellos yo,… firmamento estrellado de tus ojos, cosmos que te imanta llamándote en silencio, espacio abierto en un cielo que nos cubre a los dos, sublime necesidad del anhelo que volátil busca materializarse y hacerse palpable.
Carne que gime sudores de su esencia en la existencia del ser, que vibra incinerándose en la hoguera de la pasión, que despierta sutiles sensaciones que hibernaban insensibles y en estado de coma, moribundas, y que renacen alertas aferrándose al desafío de volver a empezar.
Alfarero que aturdido buscas moldear coraje en tu obra maestra, eliminando aristas de temores, alisando pliegues de incertidumbre que desaparecen al tacto de tus dedos diestros, acortando distancias en la perfección de las medidas.
Noches largas sin cerrar los ojos, abstracta visión irreal que te acompaña, y una decisión que con firmeza te aprieta el corazón, empujándote a realizarla.


¡NO A LA VIOLENCIA DE GÉNERO! - Y te trajo flores



Yacía tendida en el frío suelo del baño, atontada y conteniendo la respiración,… escuchaba. Oyó sus pasos alejándose, crujidos de vidrios estrellados mientras vociferaba insultos y un portazo.
Silencio,… él se había ido, no se atrevía ni siquiera a quejarse del dolor que sentía por no enfurecerlo más, era capaz de matarla.
Trato de incorporarse y se vio llena de sangre,…- ¿cuándo fue que comenzó esto?- se preguntaba,…le dolían las costillas y no podía respirar, se sujeto el costado y haciendo un esfuerzo logro ponerse en pie,…
La arcada subió a su garganta amarga como la hiel y lanzó,…no había cenado, pero el vomito bermellón le decía que algo se había roto dentro suyo,…el escusado quedo teñido de rojo.
Del espejo del baño sólo quedaba el marco,…él lo rompió con su cara cuando la sujeto de los cabellos y como a una marioneta, la incrusto contra él,…abrió el grifo del lavabo y dejó correr el agua, sus manos debajo del chorro temblaban aún, se paso los dedos cautamente por la cara tratando de reconocerse,…descubrió cortes, hinchazones, y al mojársela con cuidado, noto la sangre que caía corriendo por sus mejillas.
¡Quería morirse!,…¡ojalá la matara de una vez, así terminaba éste suplicio!,…lo prefería mil veces antes de seguir soportando las trompadas, las patadas, los agravios y los menosprecios …ni su ruego para que parase lo detenía, se enfurecía más.
El miedo le recorría el cuerpo, lo sentía como una descarga eléctrica y el gusto acre y áspero de la adrenalina en la boca, no se le iba con nada.
- Qué fácil es decir: ¡denúncialo!,…¿y después qué?,…te dicen: ¡ vete a otro lado,…lejos de aquí!,…¿ pero a dónde?,…¡ hay centros de acogida, gente que te ayudará!,…¿cómo me ayudarán?,…él me buscaría y a la larga me encontraría,…¡el miedo,…el miedo se había convertido en pánico!.
Ese miedo la paralizaba, no la dejaba pensar,…- Y pensar que una vez él fue su amor,…la primera vez que la golpeo llevaban un mes de casados,…luego le trajo flores y le pidió perdón con lágrimas en los ojos,…prometió no hacerlo más,…se excusó diciéndole que se había vuelto loco,…¿cuánto tiempo pasó hasta que lo hizo otra vez,…un mes,…luego fue a la semana?,…y así llevaba años.
No se atrevía a mirarse en el espejo del cuarto,…¿cómo haría para salir a la calle y soportar a los vecinos preguntándole que le había pasado?,…otra mentira,…¿pero cuál ésta vez?,…ya no sabía que inventarse para no sentir tanta vergüenza, era conciente que ya no podía mirar a los ojos a nadie, siempre bajaba la vista cuando respondía.
¡Maldita vida!,…¡maldito él!,…le dolía tanto el costado,…tanto,…pero no se atrevía ir al hospital, ellos se daban cuenta de todo.
Se puso un pijama y decidió acostarse, el dolor pasaría.
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Abrió la puerta llamándola por su nombre,…- Maria,…ya estoy de vuelta cariño,…¡Maria!,…¿dónde estás amor?, te he traído flores,…- miró en la cocina,… no estaba, luego en el baño y vio el destrozo y la sangre,…pero ella no estaba,…
-¡Maria!,…abrió la puerta del cuarto y la encontró tendida, pálida y quieta,…
- ¡Mira Maria!,… te traje las flores que te gustan,…violetas para ti,…
………………………………………………………………………………………..
Maria murió sola,…y él le trajo flores.

Un beso


Hay un beso varado que anclado espera,... crujiendo en el fondeadero de un mar que arrecia, batiendo espuma de la popa a la proa, aullando la quilla lastimera.
Un beso en cuyo mástil ansias ondea haciendo señas,… a esos labios que tanto anhela y aguarda, se demora, está detenido y no llega.
Botar quiere dirigiéndose a tu playa,…se guía por las estrellas bitácora fiel indicando el sur,…y al fin entre mareas de desaliento y tristeza, navega entre vientos de esperanza.
Silencio que rompe el chapoteo de las olas contra el costillaje, aromas de algas lo embriagan y en esa calma, se lo oye suspirar.
Beso que añora tu boca y en las costuras de su alma, con pasión te sueña en humedad.
En él flota lo que la vida le ofrece,…la brisa le acaricia y la noche lo seduce con delicadas volutas de aire,... suspendiéndolo en la quimera del sueño hecho realidad.
Beso que llega a la arena de tus carnes, macerado por agua azul y salada se adhiere a tu orilla como sargazo, y en el contacto ardiente,... se lo ve desmayar.

Una furtiva lágrima



Rueda silente la furtiva lágrima por su mejilla cayendo al rodar en la blanca hoja de papel,… delineados trazos en negra tinta y bella caligrafía, rubrican sensibles palabras sentidas bajo la mortecina luz de una vela, que baila ondulante entre sombras dantescas.
Sumida y angustiada por la despedida que escribe, no puede evitar lamentarse desfallecida, en el tormento del calvario de amar en silencio, al imposible amor del hombre de sus sueños.
La gota salada estalla al caer y formando una aureola en la palabra haciéndola inteligible, borronea la negra tinta y convirtiéndola en matices de grises esboza una hermosa figura,…de la furtiva lágrima nace la rosa oscura, fresca y radiante asoma a sus ojos llena de vida, aventurando lo factible del amor que todo lo puede, no existiendo las lejanías.
Una vocecilla en su interior le dice: “El trayecto es largo, pero andando el camino se acortan los trechos ya construidos, unidos corazones en el sosiego al unísono palpitan esperando, la llegada del nuevo día.
El tiempo carece de pereza, incansable trota sin detenerse ni mirar atrás, dejando a su paso ternezas que germinan al amar.
El milagro de la vida se apoya en la paciencia, que doliente y cautelosa espera poder concretar”….
Entonces comprendió,…esa rosa hace aflorar tímidamente una sonrisa y su cara se ilumina; mientras,… una brisa indiscreta y juguetona, filtrándose por una ventana, apaga la débil flama dejando inconclusa la carta, que él nunca leerá.

Fin

A ti te pienso...


Vangelis - Rachels Song


Te pienso,…a ti te pienso,…despacio y degustándote te siento,… como abrojo te llevo prendido a mi pensamiento y con él me regocijo, supurándome en los labios tus besos.
Te pienso embutido en tus silencios, abstraído por el arrullo del mar que te envuelve y aspirando los suspiros que salpican las encrestadas olas,…te siento,…te siento en la plenitud de mis ansias por tenerte y en las tuyas por poseerme encadenada a tus caderas, espoleándome vehemente.
En tu verticalidad que mira el horizonte,… yo te pienso horizontal debajo,… brincándote y desafiándote, cabalgarte tropezando con tu vertiente ensartándome, y estregándonos las pieles que aúllan anhelantes, bebernos rocíos matinales.
Arqueada la espalda, movimientos circulares y concéntricos, dilatados los sexos,…te pienso,…amante hombre que despiertas mis deseos, mezclando amor y sexo,…te siento,…en ésta vacuidad de mi soledad, recorriendo la misma senda aferrada a tu mano, con un solo sentimiento.
A ti te pienso,…te siento,…con el alma arrebolada rondándote silente y enamorada,…te pienso y te siento.

Fin

¡Qué no amanezca pido!



Me estremece la luz del sol que entra por la ventana, anunciando el fin del sueño que se revela queriendo persistir en su delirio.
En él me hallo entre tus brazos rodeando los míos tu pecho desnudo, mirándome en tus ojos en la sombría penumbra de un cuarto en el que tú no estás, brumoso como luz otoñal invadiendo mis tristezas y acaparando mis angustias.
Habitas en lo recóndito de mi alma, enajenada en el deseo de ésta hoguera que me abrasa, los muslos temblorosos abren su puerta a ésta hambruna, mendigos de tus favores para que la traspases, enarbolando impetuoso el sentido que descansa laxo en tu entrepierna, emblema del macho que me combate.
Revolotean golondrinas expandiendo gemidos heridos, besos que yacen en el amasijo de las sábanas, recreándose con lascivos labios que serpentean vericuetos sorbiéndose los líquidos,…el tuyo y el mío.
Pieles escaldadas por frenéticos roces, de manos que recorren las rutas en el mapa de las epidermis húmedas, clamando el sexo enloquecido hundirse en el abismo, de la carne que silente implora.
Desnuda sin vestimenta que engalane, prístina sencillez sin maquillaje, mujer y hembra, pura y lasciva, auténtica y apañadora,…así me descubro sin artificios, única.
¡Qué no amanezca pido!,…para seguir soñándote,…anudadas las extremidades, abrochados nuestros sentidos, abotonados como animales,…dejando escapar el grito.

Fin

Corazón


¡Calla corazón,…calla!,…cada vez que lo ves te vuelves loco, galopas en mi cansada anatomía y me provocas sofocos.
¡Calla por Dios te lo pido!,… subes el rubor a mis mejillas y no quiero que vea que por él yo vivo enceguecida.
Corazón mío me dueles,… lo sé aún en sus circunspectas vacuidades,… camina por mi epidermis sigiloso provocándome fluidas humedades.
Corazón,…¡dame un respiro!,… muero cada día envuelta en sus besos, latiendo los labios exhalando suspiros.
Mantén el ritmo, dame un poco de sosiego, …recomponme el cuerpo para aspirar sus aromas y beberme sedienta sus febriles líquidos.
Él no sabe que es la razón de mi existencia, aún no se percata que lo necesito para mantener la esperanza, …esa que llego con la brisa de sus palabras y se anido en tu cansino palpitar regalándote alas.
Corazón,… transitemos juntos sin prisas el camino, sigamos la ruta marcada persiguiendo la luz del poniente,…¡ allí,… ves!,… allí se encuentra su morada, …allí donde las olas acarician sus playas y el mar alimenta gaviotas cada alborada.

Fin

Sinfonía otoñal




Yemas prestas en el tiento, arpegios ascendentes y descendentes en la silueta de guitarra,… peregrinas surcadoras de caminos, sacuden la agitada dermis exaltada.
Vehemente sinfonía otoñal, de acordes mudos que amordazan los labios mientras sibilantes lenguas, senderos trazan reptando ebrias, para desfallecer en la sima embebida por rocíos frescos de la iluminada mañana.
Musicalidad a dos voces en los plañidos, desgarrando con uñas el tiempo suspendido y tropezar con regocijo, en la clavija que tensa, arquea el cuerpo en su delirio.
Tremolo en los labios escapan los resoplidos, besos encendidos en el preludio del verso, que hecho palabra despliega colorido.
Acordes sofocados invaden el alma, armonía de fanfarrias postradas, debilitan amainando para volver a empezar.
Obertura sincrónica, esbeltez de movimientos en la cresta de la ola, que muere cubriendo la playa y en su demencia, dominio marcar.
Alegóricos amantes,…realidad o fantasía articulan, como notas de partituras que siempre han de interpretar.

Fin

Mónica




La nada

¿Qué es la nada?, nada,… espacio repleto de nada y un universo lleno de vida, incongruencia de la soledad que deja al alma vacía.
Miles de ojos que nos miran, cientos de sombras que nos dibuja el día, pero sola, la nada se hace mía, y transito por un abismo sin salida, quebrado el cristal de la esperanza, se hace añicos en ojos que ven sin ver, en cristalizada mirada perdida.
Vacuos sentidos que anestesian el tegumento, insensible la piel se amustia deslucida, y la nada todo lo impregna, deshumanizada en ausencias de caricias.
La nada como el amor es invisible, incolora e inodora, ¡intangible!,…mientras una nos sumerge en los infiernos tortuosos del Dante, la otra nos resucita como a Lázaro descubriendo las bellezas de la vida.
Versos que nacen y circulan enamorados, apasionados, amorosos, también dolorosos, y ocupan momentos con mágicas fantasías, en la imaginación llena de ilusiones, donde la nada celosa habita.
Oquedad de voces, desierto de besos, desocupado cuerpo y amordazada alma, la nada se adueña instando a la soledad muerta, a amarrarse a la Parca que en la oscuridad espera.
Nada y muerte son compañeras, se mutan y alternan, desterrando sentimientos al país de los vivos, que reverdecen con la primavera.
¡Estoy viva!,…pero la nada ronda susurrando a la aletargada sensibilidad, arrebatando el valor al coraje, sumiéndome en profundos pozos lúgubres y en cavernas frías.
Sin entereza la nada es dueña, su audacia hay que enfrentar con valentía, su tesón con osadía, y escampará el cielo lleno de luz el día, mientras el amor surgirá despejando, silentes angustias impenitentes y tardías.
La nada es la muerte, mortaja circunspecta de misterio, opaca vestidura engañosa que nos vuelve indiferentes.
Sola y trémula la carne gimiente, vive asida del anhelo de tu boca, y de tus labios estrellados de deseos, toda la vida mía.

17/10/06 Mónica