viernes, noviembre 24, 2006

¡Buenos Aires!


Fuga y Misterio

Soy Buenos Aires y como el tango, melancólica y nostálgica,… arrabales de mí ayer que tanto añoro,…se me hace un nudo en la gola cuando escucho las notas de un fuelle, que remolón lamentos llora.
Glicinas, malvones y jazmines le dan vida a los patios, la voz de la vieja que me llama por la mañana y me ofrece un mate, mientras el sol entra por la ventana inundando la pieza de luz, cegándome la mirada.
Es el ayer que me llama del otro lado del charco,… ¡hola che!,…¡qué haces piba!,…¡vamos a los Bosques de Palermo!,…y me envuelven los olores de Madre Selvas florecidas, trepándome y enroscándose por mis piernas hasta mis entrañas, donde sangra mi herida.
¡Cómo duele el corazón en la lejanía!,…volver, volver a pisar la Boca y en un Bodegón, pedir pizza con faina, ¡faina!,…aquí no existe,…recorrer Caminito mientras el Riachuelo despide pestilencias, de una ciudad que nunca duerme, porque está viva y en marcha.
Malandras, chorizos y ladrones de guante blanco, salen de sus madrigueras chamuyando y los giles caen desconcertados, pero siempre hay una vecina dispuesta a darte una mano, y la milonga sigue y sigue,…politizando.
Volver a pisar tus plazas y subirme a una calesita para agarrar la sortija y darme otra vuelta más,... ¡si parece que fue ayer cuando la vieja me hacia las trenzas y me llevaba al colegio!,…¡la Manuelita!,… que maestra más mala y antigua, me castigaba por llevar el guardapolvo blanco y almidonado cortito, quería que la vieja le bajara el dobladillo hasta hacerlo tomar agua,…ya no existe más.
Tampoco está más mi hermana, la quise y la quiero tanto,…me sentí abandonada cuando se fue,¡ anda a saber a dónde!,… al cielo para los que creen en él.
Hija y nieta de inmigrantes, hoy yo soy una de ellos,…¡ y extraño la tierra que me parió y a mi gente solícita y solidaria!,…
Buenos Aires, mí Buenos Aires, Corrientes y la 9 de Julio, el obelisco,…la Recolecta y el Café “ El Arte”, frente a la Facultad de Derecho donde hice pinitos,…Retiro y la Plaza San Martín, el monumento a los soldados caídos en Malvinas, cientos de nombres escritos en una fría piedra, cual lápida que los recuerda.
Perón y Evita, el Che, Borges y Sábato, Quinquela Martín,Troilo y Piazzolla, Maradona,… y el cielo celeste y blanco de nubes, como la bandera que ondea en Plaza de Mayo recordando la gesta de ¡Libertad! en las puertas del Cabildo.
…Los amigos,¡ mis amigos!,…tardecitas con mate y factura, medias lunas de grasa y de manteca y el pucho que mataba el tiempo, dibujando con sus volutas de humo gris tantos sueños,… y llegaba la noche ensordecedora, salir del trabajo mezclándote con la marea humana y esperar al bondi que siempre estaba lleno, sin respetar dolores de pies ni cansancio,… bocinazos apurados por llegar a casa,…¡a casa!,... el puchero esperaba caliente y humeante,…y si era sábado o domingo el asado,…sobremesa jugando al truco y el fútbol,…el fútbol y en la bombonera Boca contra River, un clásico.
…¡Y el tango, siempre el tango!,…la viola a mano y subida en los pies del que quise tanto, aprender a bailarlo siendo una purreta con los mocos colgando.
El café en donde filosofamos tantas noches,…¡paren el mundo, me quiero bajar!,…y las risas,…alegría de vivir instalada en las esquinas soñando, siempre soñando,…y el primer amor que nos robó un beso, ruborizadas mejillas y la pasión en las manos.
… -¡Qué haces che!, ¿cómo te trata la vida?-,…¡yo qué sé!,…¡pero vuelvo a vos Buenos Aires!, a tomar mate con la vieja y a recibir la nueva vida que mi hija lleva encima,…¡un nieto!, el primero.
¡Buenos Aires!,…¡oíd, mortales el grito...!,…esté dónde esté te llevo en el alma metida, mina de pies a cabeza soy porteña de Buenos Aires y…¡ Argentina hasta que muera!.